¿En qué hay que fijarse?

Las lesiones cutáneas son alteraciones que se producen en la superficie o bajo la superficie de la piel. Algunas están asociadas al envejecimiento, pero pueden aparecer en cualquier etapa de la vida. Las lesiones cutáneas son comunes y normalmente inofensivas, pero, en ocasiones, pueden ser signos de advertencia de algo más grave, incluido el cáncer de piel.

 

Afortunadamente, las lesiones cancerosas pueden identificarse con un adecuado control, lo que permite que sean tratadas de manera más efectiva. Haga clic en las Páginas del carcinoma basocelular, carcinoma espinocelular, queratosis actínica y melanoma para obtener más información sobre los distintos tipos de lesiones cutáneas a efectos de ayudarle en su control.

 

En general, debería revisar su piel en busca de manchas que:

 

  • Han cambiado de color, tamaño o forma
  • Son diferentes del resto
  • Son asimétricas o tienen bordes irregulares
  • Tienen un tamaño superior a 6 mm
  • Tienen un tacto áspero o escamoso (en ocasiones, puede notar la existencia de una lesión antes de que se haga visible)
  • Tienen varios colores
  • Pican
  • Sangran
  • Tienen una superficie brillante
  • Parecen una herida pero no cicatrizan

 

No dé por supuesto que una mancha sospechosa es inofensiva simplemente porque no duela. La mayoría de las lesiones cancerosas no son dolorosas ni producen molestias de ningún tipo.

 

La regla ABCDE

 

Un modo sencillo de recordar algunos de estos signos es la regla ABCDE.

A

¿Es la lesión Asimétrica?

 

B

¿Tiene Bordes borrosos o irregulares?

C

¿Cambia de Color?

 

D

¿Tiene un Diámetro superior a 6 mm?

 

E

¿Ha Evolucionado con el tiempo su tamaño, su forma o su comportamiento?

El signo del “Patito Feo”

 

Todos sus lunares deberían ser bastante parecidos; la misma forma y los mismos colores. Si aparece una nueva lesión que es diferente del resto, podría ser sospechoso. Es lo que se conoce como el signo del “Patito Feo”.